_general.jpg?v=63903558199)
La espectacular ciudad balneario Patrimonio de la Humanidad en el oeste de República Checa
Con una arquitectura histórica y más de cuarenta manantiales, este lugar es el destino perfecto para unos días de relax en Europa.
Los balnearios son uno de los enclaves más visitados del mundo, donde la paz y tranquilidad son las protagonistas sumergidas en aguas termales, manantiales, saunas y masajes. Pasar un fin de semana en uno de ellos es la manera perfecta de desconectar, y en España hay un sinfín de ellos. Pero lo cierto es que hay otra zona del mundo en la que abundan y que no puedes perderte.
Uno de los principales atractivos de Europa son los numerosos manantiales de aguas naturales que emergen del suelo y de las cuales el ser humano aprovecha sus propiedades y beneficios. En el pasado, el auge de las ciudades balneario inundó esa zona del continente y gracias a ello, a día de hoy, podemos disfrutar de estas maravillas arquitectónicas.
Historia de Mariánské Lázně
La historia de esta espectacular ciudad se remonta a la Edad Media, cuando quedó constancia de los efectos curativos de los manantiales de la zona. Fue en el año 1528, cuando el rey Fernando I comenzó a estudiarlas en profundidad. El primer edificio se construyó en 1805 y desde entonces comenzó su crecimiento. En 1818 se declaró 'lugar balneario público'.
Poco a poco se iniciaron las labores de construcción de la ciudad con casas, miradores, palacetes y otros muchos elementos basados en la arquitectura clasicista e imperial. Pero no fue hasta 1865 cuando obtuvo la categoría de ciudad. En 2021, Mariánské Lázně, y otras diez ciudades balneario europeas fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Los encantos de Mariánské Lázně
Esta ciudad está repleta de parques, balnearios, edificios románticos, grandes pabellones, cafeterías, tiendas y hoteles, todos ellos dedicados al relax y a crear una experiencia única. El territorio cuenta con más de cuarenta manantiales y la combinación del clima de las colinas con la naturaleza, lo convierten en un destino perfecto para el cuidado de la salud y el bienestar.
Aunque lo principal y más llamativo de Mariánské Lázně son sus balnearios, también ofrece preciosos enclaves que no puedes perderte. Pasear por sus calles será como hacer un viaje en el tiempo a un pasado donde el lujo y el arte convivían en un mismo lugar.
Uno de ellos es la fuente cantante, un elemento decorativo, símbolo de la ciudad que cada día entona una canción y un espectáculo de luces. Durante la temporada alta, cuando más personas visitan la ciudad, suena todos los días de 7:00 a 19:00 cada hora impar, a las 21:00 y a las 22:00, incluyendo una proyección con iluminación de colores.
Por otro lado, la columnata neo barroca del 1888-1889, es un raro ejemplo de edificios históricos que han logrado llegar a nuestros días gracias a las labores de conservación y que es una auténtica maravilla que deja sin palabras. Sus características arquitectónicas son la prueba viva de la magnitud de esta ciudad hace más de cien años.
