El fiscal general alegó que los medios difundieron los correos de la pareja de Ayuso cuando él todavía los estaba leyendo
La transcripción de la declaración de Álvaro García Ortiz revela que acusó a Alberto González Amador de haber difundido él mismo uno de sus correos: "Esa conducta no es propia de quien quiere guardar un secreto"El número dos del fiscal general también niega ante el Supremo haber filtrado datos de la pareja de Ayuso El fiscal general del Estado compareció ante el juez Ángel Hurtado durante más de hora y media para negar, de forma tajante, que él o cualquiera de sus colaboradores filtrara información de la causa de fraude fiscal contra la pareja de Isabel Díaz Ayuso. “Estoy absolutamente seguro de que ningun fiscal de este país ha hecho una filtración”, dijo. También reveló que en la noche del 13 de marzo los medios de comunicación empezaron a hacerse eco de la confesión de Alberto González Amador cuando él todavía estaba leyendo la documentación y todavía tenía correos por examinar, rechazando así que él hubiera filtrado su contenido. Álvaro García Ortiz se convirtió el pasado 29 de enero en el primer fiscal general en comparecer como imputado en una causa penal. Lo hizo para negar que él o sus colaboradores filtraran a la prensa datos confidenciales del caso de fraude fiscal de Alberto González Amador: ni el correo con su confesión ni previamente el expediente de Hacienda que había constatado su fraude de 350.000 euros en el Impuesto de Sociedades de 2020 y 2021. El fiscal general arrancó su comparecencia, entre otras cosas, criticando que Alberto González Amador haya ocultado durante meses a los tribunales que fue él mismo quien difundió uno de los correos del caso: el que el fiscal Julián Salto envió a su abogado el 12 de marzo y que Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabiente de Isabel Díaz Ayuso, remitió a su vez a decenas de periodistas. “El querellante no ha sido leal. Esa conducta no es propia de quien quiere guardar un secreto”, ha dicho. En la noche del 13 de marzo, cuando Miguel Ángel Rodríguez había difundido información falsa del caso a diversos medios, el fiscal general recibió una llamada de Almudena Lastra, fiscal jefe de Madrid, y pusieron en marcha los mecanismos para desmentir esas noticias. Esa noche, después de que El Mundo publicara a las 21.29 horas que la Fiscalía había ofrecido el pacto al empresario y no al revés, es cuando él se entera de que habían existido esas negociaciones. “Es la primera vez que yo tengo conocimiento de que hay un cruce de correos”, alegó ante el juez. Las primeras informaciones sobre la confesión que el abogado de González Amador había enviado al fiscal del caso en febrero llegaron mientras él todavía estaba examinando la documentación remitida por el fiscal Julián Salto. “Cuando todavía estoy leyendo ese correo me informa la jefa de prensa que hay un medio, La Sexta”, explicó, que ya estaba desmintiendo las informaciones difundidas por Rodríguez. “A las 22.10 yo todavía estoy leyendo ese correo”, alegó ante el juez, explicando que todavía no había recibido el segundo email. Cuando una hora más tarde la Cadena SER revela el contenido del email con la confesión, afirmó el fiscal general, “yo en ese momento todavía no me he hecho una cabal idea de lo que está pasando, sigo sin tener el correo del día 12 de marzo”. En un primer momento el fiscal general entendió que la información que ofrecía El Mundo “tiene todos los visos de poder ser verdad”, pero luego comprueba que “se está extrayendo una mentira. Se estaba dando una información falsa”. También tomó una decisión: “No iba a hacer uso del documento” adjunto en el correo con el que el abogado del empresario daba detalles de su oferta de pacto. Ese documento, que no incluyó en el comunicado del día siguiente, tenía “datos que sí pueden ser sensibles”. Polémica con la fiscal Lastra El fiscal general defendió a lo largo de su comparecencia que, en cualquier caso y tras negar la filtración, el comunicado que emitió la Fiscalía en la mañana del 14 de marzo para desmentir esas informaciones falsas no reveló ningún secreto. “La mentira no puede ser nunca un secreto”, afirmó. El fiscal general también se refirió a la posición de Almudena Lastra, fiscal jefe de Madrid cuyo testimonio en esta causa es considerado clave por las acusaciones. García Ortiz reconoció ante el juez Hurtado que “lo sabe toda la curia fiscal y judicial, hay un desafecto de la señora Lastra a quienes dirigimos la Fiscalía española”. También matizó el malestar de la fiscal madrileña con la Fiscalía General esa noche: ella también estaba de acuerdo en desmentir las informaciones falsas del caso, llegó incluso a proponer una rueda de prensa, pero se molestó porque para cuando la Fiscalía emitió su comunicado toda la información ya estaba en los medios. “Yo dudo mucho que un fiscal de este país se dirija al fiscal general en esos términos, me cuesta mucho pensar que eso ha podido imaginarse”, afirmó García Ortiz sobre la decl
![El fiscal general alegó que los medios difundieron los correos de la pareja de Ayuso cuando él todavía los estaba leyendo](https://static.eldiario.es/clip/b7c7cd33-c2e6-4443-91cf-4e5134d0ea75_16-9-discover-aspect-ratio_default_0.jpg?#)
La transcripción de la declaración de Álvaro García Ortiz revela que acusó a Alberto González Amador de haber difundido él mismo uno de sus correos: "Esa conducta no es propia de quien quiere guardar un secreto"
El número dos del fiscal general también niega ante el Supremo haber filtrado datos de la pareja de Ayuso
El fiscal general del Estado compareció ante el juez Ángel Hurtado durante más de hora y media para negar, de forma tajante, que él o cualquiera de sus colaboradores filtrara información de la causa de fraude fiscal contra la pareja de Isabel Díaz Ayuso. “Estoy absolutamente seguro de que ningun fiscal de este país ha hecho una filtración”, dijo. También reveló que en la noche del 13 de marzo los medios de comunicación empezaron a hacerse eco de la confesión de Alberto González Amador cuando él todavía estaba leyendo la documentación y todavía tenía correos por examinar, rechazando así que él hubiera filtrado su contenido.
Álvaro García Ortiz se convirtió el pasado 29 de enero en el primer fiscal general en comparecer como imputado en una causa penal. Lo hizo para negar que él o sus colaboradores filtraran a la prensa datos confidenciales del caso de fraude fiscal de Alberto González Amador: ni el correo con su confesión ni previamente el expediente de Hacienda que había constatado su fraude de 350.000 euros en el Impuesto de Sociedades de 2020 y 2021.
El fiscal general arrancó su comparecencia, entre otras cosas, criticando que Alberto González Amador haya ocultado durante meses a los tribunales que fue él mismo quien difundió uno de los correos del caso: el que el fiscal Julián Salto envió a su abogado el 12 de marzo y que Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabiente de Isabel Díaz Ayuso, remitió a su vez a decenas de periodistas. “El querellante no ha sido leal. Esa conducta no es propia de quien quiere guardar un secreto”, ha dicho.
En la noche del 13 de marzo, cuando Miguel Ángel Rodríguez había difundido información falsa del caso a diversos medios, el fiscal general recibió una llamada de Almudena Lastra, fiscal jefe de Madrid, y pusieron en marcha los mecanismos para desmentir esas noticias. Esa noche, después de que El Mundo publicara a las 21.29 horas que la Fiscalía había ofrecido el pacto al empresario y no al revés, es cuando él se entera de que habían existido esas negociaciones. “Es la primera vez que yo tengo conocimiento de que hay un cruce de correos”, alegó ante el juez.
Las primeras informaciones sobre la confesión que el abogado de González Amador había enviado al fiscal del caso en febrero llegaron mientras él todavía estaba examinando la documentación remitida por el fiscal Julián Salto. “Cuando todavía estoy leyendo ese correo me informa la jefa de prensa que hay un medio, La Sexta”, explicó, que ya estaba desmintiendo las informaciones difundidas por Rodríguez. “A las 22.10 yo todavía estoy leyendo ese correo”, alegó ante el juez, explicando que todavía no había recibido el segundo email.
Cuando una hora más tarde la Cadena SER revela el contenido del email con la confesión, afirmó el fiscal general, “yo en ese momento todavía no me he hecho una cabal idea de lo que está pasando, sigo sin tener el correo del día 12 de marzo”.
En un primer momento el fiscal general entendió que la información que ofrecía El Mundo “tiene todos los visos de poder ser verdad”, pero luego comprueba que “se está extrayendo una mentira. Se estaba dando una información falsa”. También tomó una decisión: “No iba a hacer uso del documento” adjunto en el correo con el que el abogado del empresario daba detalles de su oferta de pacto. Ese documento, que no incluyó en el comunicado del día siguiente, tenía “datos que sí pueden ser sensibles”.
Polémica con la fiscal Lastra
El fiscal general defendió a lo largo de su comparecencia que, en cualquier caso y tras negar la filtración, el comunicado que emitió la Fiscalía en la mañana del 14 de marzo para desmentir esas informaciones falsas no reveló ningún secreto. “La mentira no puede ser nunca un secreto”, afirmó.
El fiscal general también se refirió a la posición de Almudena Lastra, fiscal jefe de Madrid cuyo testimonio en esta causa es considerado clave por las acusaciones. García Ortiz reconoció ante el juez Hurtado que “lo sabe toda la curia fiscal y judicial, hay un desafecto de la señora Lastra a quienes dirigimos la Fiscalía española”. También matizó el malestar de la fiscal madrileña con la Fiscalía General esa noche: ella también estaba de acuerdo en desmentir las informaciones falsas del caso, llegó incluso a proponer una rueda de prensa, pero se molestó porque para cuando la Fiscalía emitió su comunicado toda la información ya estaba en los medios.
“Yo dudo mucho que un fiscal de este país se dirija al fiscal general en esos términos, me cuesta mucho pensar que eso ha podido imaginarse”, afirmó García Ortiz sobre la declaración de Lastra, cuando explicitó al tribunal que había preguntado abiertamente al fiscal general si él había filtrado información del caso. Lastra, además, nunca puso pegas al contenido de la nota: “Nunca fue reticente con el contenido, lo fue con que todo estaba revelado y dijo en sus propias palabras que hacíamos el ridículo si dábamos una información que ya había sido publicada”.
Como el resto de imputados, García Ortiz explicó que esos correos y todo el expediente estuvieron a disposición de más fiscales, no solo de su núcleo más cercano en la Fiscalía General, y que eso incluye a la fiscalía madrileña que dirige Lastra, de quien dijo estár “absolutamente seguro de que no había filtrado nada.