Los Mavericks meditan movimientos menores

En el cierre de mercado de 2024, el general manager de los Dallas Mavericks, Nico Harrison, perfiló el equipo que, a la postre, se ganaría un puesto en las Finales de la NBA con las adquisiciones de P.J. Washington y Daniel Gafford.

Demostrado así que la plantilla de Texas dispone de lo necesario para luchar por el anillo, este trade deadline se presenta ahora mucho más tranquilo, aunque la gerencia no dejará pasar una oportunidad si esta se presenta.

«Nos gusta nuestro equipo», declaró Harrison hace dos semanas en el podcast Mavs Step Back. «No queremos tomar algo solo para el corto plazo. Siento que nuestro equipo ya está construido para los próximos años. Si surge algo que tenga sentido, obviamente lo haremos. Analizamos todo, pero no vamos a precipitarnos por las lesiones que hemos sufrido».

Es posible que se esté gestando un posicionamiento muy cauto este año, pero es difícil ver a Harrison dejando pasar la fecha límite sin hacer una sola operación. El año anterior a los traspasos de Washington y Gafford, Harrison adquirió a Kyrie Irving y Markieff Morris para colocar así una co-estrella al lado de Luka Doncic. En 2022, los Mavericks obtuvieron a Davis Bertans y Spencer Dinwiddie, quien fue traspasado y traído de vuelta desde entonces.

Por ello, desde el Dallas Morning News informan que, en caso de acometer algún movimiento, los Mavericks estarían interesados en incorporar un pívot suplente o un alero de corte defensivo. Así, todo se reduce a medir esfuerzos: los Mavericks cuentan con activos limitados, por lo que no estarán en disposición de apuntar alto. Por ello, el periodista Mike Curtis propone tres nombres orientativos en dicha pieza: Chris Boucher, Isaac Okoro y Obi Toppin.

(Fotografía de portada de Jerome Miron-Imagn Images)