Cómo son las novedosas bicicletas acuáticas que marcan tendencia en el río
Síntesis de la naútica y el ciclismo, marcan tendencia por ser livianas, transportables y aptas para todas las edades
Antes de ser socios, Nicolás Sparapani y Marcelo Mandino fueron unos amigos a los que los vinculaba el amor por el Delta y la pasión por los deportes náuticos. Hoy, además, los une Deltabike, “la primera fábrica de bicicletas acuáticas de Argentina” que crearon a partir de una charla de fin de semana, mientras miraban el río sentados en un muelle en plena pandemia.
“Estábamos charlando, viendo pasar los kayaks y los SUP (Stand Up Paddle), y los dos pensamos lo mismo, que no había una bicicleta para el agua. Nos miramos y dijimos: ‘¿Por qué no armamos una?’”, cuenta Sparapani, que en ese momento trabajaba en una empresa de transporte. Mandino, en cambio, había estado vinculado en su juventud al diseño naútico pero después lo dejó y empezó a trabajar en una compañía del rubro eléctrico. El expertise, sin embargo, lo conservaba.
La búsqueda de la bici acuática perfecta no fue sencilla y en el camino hubo mucha investigación, ensayo y error, hasta que, hace poco más de un año, los amigos dieron con el modelo perfecto y empezaron a fabricarlas y a venderlas a los distintos paradores del Delta, donde las alquilan a un promedio de 30 mil pesos la hora o las ofrecen para el uso de los clientes que se alojan en las posadas de la zona. También las compran particulares que tienen casa en las islas o en los barrios cerrados con lagunas y buscan sumar un medio de transporte y esparcimiento. A su vez, las bicis traspasaron los límites del Delta y se ven en Bariloche, Potrerillos, Uruguay y Brasil.
“Yo tengo casa en el Delta y acá todos tienen kayaks, que son como una especie de bicicleta porque se usan para recorrer distancias cortas –dice Sparapani–. Pero el problema con estos botes es que la posición es incómoda, a las personas mayores se les hace bastante difícil subir y bajar y necesitás de cierto estado físico. Además, en invierno te mojás. Ni hablar del SUP, que es mucho más complicado: tenés que tener equilibrio y fuerza de brazos. En cambio, las bicis acuáticas son estables y no te exigen hacer fuerza porque se deslizan por el agua suavemente. Te subís y salís pedaleando a tu ritmo”.
Por su parte, Germán Rodgers, de Spatium Argentina, otra de las empresas que comercializan estas embarcaciones en el país, cuenta que conoció las waterbikes por un amigo que viajaba mucho a China y se las mostró. Quedó tan fascinado que empezó a importarlas. “Es un emprendimiento que comenzó el año pasado. Solo las comercializamos, no las alquilamos. Para que la gente las conozca y pueda probarlas organizamos salidas fijas desde San Fernando”, cuenta Rodgers.
Aunque muchos las comparan con los famosos botes de los Lagos de Palermo, hay que decir que desde el punto de vista estético son una mezcla de SUP, por su estructura flotante de espuma de poliestireno, y bicicleta fija. “Se adaptan a cada lugar. Andan muy bien a contracorriente y también con olas pequeñas –sostiene Sparapani–. La gente las lleva de viaje porque además son muy fáciles de armar y desarmar, no se tarda más de ocho minutos en tenerla lista y no se necesitan herramientas, solo el inflador para darle aire a los pontones. Además, todas las partes, salvo el cuadro, entran en un bolso”.
La practicidad y portabilidad también es algo que destacan en Spatium Argentina: “Es de fácil armado y además ofrece un ejercicio al aire libre de bajo impacto que puede practicarse en todas las estaciones del año”. También aseguran que pueden usarlas desde niños –de hecho tienen un modelo junior especialmente diseñado para los más pequeños– hasta personas mayores de hasta 200 kilos.
Hay varios modelos que ofrecen experiencias distintas: Deltabike tiene uno individual con inflables redondos como los de un gomón y el modelo flat con dos tablas similares a las de SUP y otra tabla horizontal que cruza detrás para llevar a alguien, que es el que más se vende. “Además, tenemos un modelo con plataforma delantera que sirve para salir a pescar y permite llevar las cañas y las heladeritas. Todas las bicis vienen con un canasto y un portacelular en el manubrio”, cuentan desde la empresa.
En Spatium Argentina, además del junior hay uno individual y otro doble para pasear en pareja, que tiene triple pontón y soporta hasta 320 kilos. Los tres modelos comercializados también incluyen accesorios.
“Son cómodas, seguras y hasta podés ir tomando mate sin problemas mientras pedaleás –plantea Sparapani–. Las bicis acuáticas llaman mucho la atención, son la novedad de este verano y están de moda porque son la síntesis perfecta de dos deportes muy populares como la náutica y el ciclismo”, aseguran desde Deltabike, que produce unas 25 bicicletas acuáticas por mes.
¿Otra clave de su éxito? Sin duda, son ciento por ciento instagrameables y eso las convierte en un atractivo perfecto para los incansables creadores de contenido que buscan sorprender a sus seguidores y conseguir el deseado like.