Amazon suspende su servicio de entrega con drones tras sufrir dos accidentes bajo la lluvia

Amazon Prime Air es un sistema de envío que entrega paquetes en un tiempo inferior a 30 minutos gracias a los drones. Este proyecto recibió su primera aprobación para ponerse en marcha en 2020 y, desde entonces, el gigante ecommerce ha trabajado duramente para ofrecer este servicio en más países del mundo —a día de hoy, solo se encuentra disponible en Estados Unidos—.

Pese a que Amazon quiere que este proyecto se convierta en una iniciativa exitosa, los resultados se han puesto en tela de juicio, ha acumulado despidos de empleados e incluso se ha acusado a los drones de provocar accidentes e incendios forestales. Además, por si fueran pocas las dudas e incidentes sobre su viabilidad, recientemente, Amazon ha puesto en pausa sus servicios de reparto aéreo tras varios accidentes.

Esta suspensión afecta a las operaciones comerciales en Texas y Arizona, pero, ¿qué ha pasado exactamente para que Prime Air se vea obligado a parar su actividad?

El diario Bloomberg revela que "dos incidentes separados en los últimos meses han obligado a Amazon a actuar". Concretamente, en diciembre del año pasado, dos drones se estrellaron en las instalaciones de pruebas de la empresa en Pendleton (Oregón, Estados Unidos) porque las condiciones climáticas no eran las más favorables al estar lloviendo. Asimismo, el otro incidente, que tuvo lugar el pasado septiembre, estuvo relacionado con dos operadores que lanzaron inadvertidamente dos vuelos de prueba de forma simultánea, lo que resultó en una colisión en el aire.

Ante tales accidentes, el diario DroneXL afirma que "la suspensión llega en un momento crucial para Prime Air, que tiene como objetivo entregar aproximadamente 500 millones de paquetes al año para 2030". Agregando que "plantea serias dudas sobre la preparación técnica y los protocolos de seguridad del programa".

Las terribles consecuencias de estos dos accidentes

El accidente en condiciones de lluvia pone en duda la resistencia del dron MK30 de Amazon a las inclemencias meteorológicas, ya que, supuestamente, este dispositivo puede operar en condiciones meteorológicas adversas.

Y, por otro lado, la colisión cuestiona los protocolos operativos de Amazon, sugiriendo posibles deficiencias en la coordinación de vuelos y en los procedimientos de seguridad. "Este incidente es especialmente preocupante dado que se produjo durante condiciones de prueba controladas, en lugar de operaciones de entrega reales", advierte DroneXL.

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