Paliza histórica de los Celtics en San Francisco

Los Warriors no llegaban al choque ante los Celtics en su mejor momento, pero se van de él prácticamente en el peor. Los de Kerr han recibido su peor paliza como locales en los últimos 40 años al caer por un demoledor 85-125, resultado que evidencia las enormes diferencias entre el estado de unos y otros.

Y es que desde aquellas Finales de 2022, que parecían estar aún en la cabeza de Boston durante el choque, ambos equipos han tomado direcciones opuestas. Los Celtics siguieron creciendo hasta convertirse en todo un superequipo, mientras que Golden State se ha ido desmoronando hasta perder todo lo les llevó tan lejos en su momento.

Y así, mientras unos son segundos del Este sin haber empezado siquiera a sudar, los otros siguen fuera de los puestos de play-in.

Desbordados

El conjunto de Mazzulla no necesitó de ninguna exhibición individual para hacerse con semejante ventaja, pues su defensa anuló de tal manera a los locales que estos en ningún momento pudieron seguirles el ritmo. Stephen Curry con 18 puntos y Buddy Hield con 13 fueron los únicos en dobles dígitos, lo que hizo imposible lograr una anotación suficiente, mientras que en el otro lado todo fluía con mucha más naturalidad.

Jayson Tatum se encargó de comandar a los suyos con 22 tantos, seguido de los 18 de Jaylen Brown y los 17 de Kristaps Porzingis, quienes no necesitaron más para dejar todo visto para sentencia. De hecho, ninguno de los titulares pasó más de 28 minutos en pista. Y atendiendo al resultado, habrían bastado incluso unos cuantos menos.

Third quarter… ¿Celtics?

Golden State fue durante su época dorada una máquina de triturar equipos tras el descanso, hasta el punto de que la grada parecía esperar ya una avalancha durante el tercer cuarto. Y hoy la avalancha llegó, pero para caerles encima.

La diferencia al descanso era ya de unos 15 puntos que obligaban a los locales a una segunda mitad sin errores, pero, lejos de ello, lo que llegó fue una dosis de su medicina más amarga. Con un parcial de salida de 7-22, la diferencia se disparó a los 30 tantos en cuestión de minutos, y una vez ahí siguió creciendo hasta llegar a los 34 antes de que concluyese el periodo (63-97). Y aún le quedaba algo más por crecer.

(Fotografía de portada: Cary Edmondson-Imagn Images)