Miles de personas se manifiestan en Madrid ante el alto al fuego en Palestina: “Que Israel pague por lo que ha hecho”

Miles de personas han reivindicado el fin de la masacre que Israel está perpetrando en Palestina en una protesta que ha discurrido por el centro de Madrid. Al igual que en otras 100 ciudades de España, la Red Solidaria contra la Ocupación de Palestina (Rescop) ha llamado a la movilización justo la jornada anterior a que se imponga el esperado alto al fuego por parte de Israel, que entrará en vigor a las 7.30 horas de este domingo, 19 de enero. Según la organización, 10.000 personas han secundado la convocatoria.

Cuando la cifra oficial de asesinados en Palestina se aproxima a las 50.000 víctimas, los manifestantes han pedido el embargo de armas a Israel y el fin de cualquier tipo de relación. También han exigido que el Gobierno español “termine con el inmovilismo que le ha caracterizado y le ha hecho erigirse como un actor pasivo ante el genocidio”.

Así lo ha afirmado Hania Faydi, portavoz de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) de Madrid, entidad integrada en la Rescop, momento antes de iniciar la marcha. Pocos minutos después, en torno a las 18.00 horas, la cabecera ha empezado a andar desde la Plaza de Cibeles. Un solo mensaje abría la manifestación: “Alto al genocidio en Palestina. ¡Viva la lucha del pueblo palestino!”. Detrás, cientos de voces se desgañitaban coreando soflamas como “¡Boicot a Israel!”, “Palestina vencerá desde el río hasta el mar”, y “las tierras robadas serán recuperadas”.

“Cuanto más inmovilismo haya por parte del Gobierno español, más va a salir a la calle la Rescop”, ha anunciado Faydi. Esta activista ha criticado que el Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez, “que presume de valores democráticos y de respetar los Derechos Humanos, no ha puesto en marcha ninguna medida que se haya materializado en un intento de frenar el genocidio palestino”.

La portavoz de BDS Madrid ha recalcado que “Israel lleva 15 meses de genocidio, precedido por 76 años de ocupación y opresión, para doblegar al pueblo palestino, y aun así no lo consigue, por lo que destruye y mata ya sin objetivos claros más que su aniquilación”. El rojo, negro, blanco y verde de las banderas coloreaba el inicio de Gran Vía cuando Faydi ha sido enérgica en sus palabras: “Si nuestro Gobierno sigue llamando Gobierno amigo a Israel, llama amigo a un Estado genocida y se convierte cómplice de la masacre”.

Hace apenas unos días, la revista científica ‘The Lancet’ publicó un estudio en el que aumentaban en un 70% las muertes en Gaza tras la invasión israelí. Según la investigación, hasta 64.260 personas habrían sido asesinadas en los primeros nueve meses de conflicto frente a las 37.877 contabilizadas por las autoridades de la Franja. A día de hoy, el Ministerio de Sanidad palestino cifra en más de 46.537 personas las asesinadas y casi 110.000 las heridas.

“El genocidio ya se ha cometido”

Faydi ha señalado que “el alto al fuego es un respiro para la población palestina que hará que no les sigan bombardeando, pero es un alto al fuego muy frágil que no hará que dejemos de salir a las calles”. La portavoz ha reiterado que “el genocidio ya se ha cometido, ahora Israel tiene que pagar por lo que ha hecho”. Mientras tanto, una mujer con guantes rojos que simulaban unas manos manchadas de sangre repetía a gritos “cada niño muerto es un niño nuestro”.

Cerca de ella estaba Ziad sosteniendo un dibujo del doctor palestino Hussam Abu Safye: “Lideraba un hospital arrasado por Israel. La última vez que se le vio fue enfrentándose a los tanques. Desde entonces, no se sabe si le han detenido o matado”, ha explicado. Unos metros más allá, Maite Kemmler, madrileña de 81 años residente en Alemania, ha comentado que “es una barbaridad que Israel esté matando palestinos hasta el último momento del alto al fuego”. También ha criticado con vehemencia la persecución que sufre el movimiento en solidaridad con Palestina en Alemania.

Saida Ghodaieh tiene 46 años, vive en la capital y ha sido tajante en sus palabras: “A pesar del alto al fuego, tardío pero muy esperado, reivindicamos la libertad del pueblo palestino y su derecho de autodeterminación, el fin del apartheid y los crímenes de guerra, y seguimos solicitando al Gobierno español el embargo de armas hacia Israel, un Estado genocida”. “Deben rendir cuentas ante el Tribunal Internacional de Justicia”, ha añadido.

Paz, pero también justicia

Cuando la marcha descendía hacia la Plaza de España, Ouajih Allaoui se ha colocado frente a la cabecera. Llegado desde Aranjuez y natural de Marruecos, ha expresado que “no solo queremos un alto al fuego y la paz, sino también justicia”. Caída la noche, los manifestantes han coreado soflamas a favor del boicot a empresas como Carrefour y Starbucks justo delante de algunos de sus comercios en la gran arteria madrileña. Impasibles, varios muñecos gigantes apostados en las aceras de Gran Vía han sido testigos de cánticos como “vosotros sionistas sois los terroristas”, “quemar inocentes no es defensa propia” y “eran hospitales, no bases militares”.

En ese momento, Faydi ha reiterado que la idea de boicot, desinversión y sanciones a Israel sigue presente tras el alto al fuego. “Nuestro trabajo es previo a este genocidio. Antes de octubre del 2023 ya había limpieza étnica, apartheid, opresión, colonialismo y torturas”, ha denunciado la activista propalestina. También ha defendido que “si esto está ha pasado en Palestina y sus responsables no rinden cuentas ante la justicia internacional, puede volver a pasar en cualquier lugar del mundo sin ningún tipo de consecuencia”.

Desde su punto de vista, ha quedado comprobado que “los mecanismos autoimpuestos tras la Segunda Guerra mundial ya no valen, no se respetan los tratados y el neofascismo avanza en Europa”. Más tarde, el texto que ha cerrado la movilización diría lo siguiente: “La lucha de Palestina es la lucha global contra el racismo, el fascismo y el colonialismo. Y es parte central de la lucha feminista y por la justicia climática”.

La “solidaridad impostada” del Gobierno español

En torno a las 19.40 horas la manifestación ha dado sus últimos pasos unos metros antes de Plaza de España. En el comunicado final, leído ante miles de personas, han recordado que “la Franja de Gaza está completamente arrasada, más del 10% de la población ha sido asesinada por los bombardeos, el hambre, o la falta de asistencia sanitaria, y aunque se retiren las tropas genocidas, seguirá sometida a un bloqueo inhumano e ilegal”.

Por eso, han asegurado que seguirán presionando al Gobierno español para que rompa sus complicidades y para que imponga de inmediato un embargo de armas “porque la opresión continúa, y la ruptura de las relaciones militares y de seguridad sigue siendo un elemento necesario para dejar de apuntalar a un estado criminal”, en sus propios términos. Desde su perspectiva, “imponer un embargo de armas a Israel es una obligación mortal, ética y legal”.

Asimismo, han arremetido contra el Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez. La Rescop ha exclamado que todavía se mantienen “las relaciones militares y de seguridad prácticamente intactas y engañando a la sociedad con una solidaridad impostada”. Finalmente, la organización ha vuelto a proclamar ante los presentes sus principales demandas: el embargo de armas completo e inmediato a Israel, la ruptura de cualquier tipo de relación y el fin de la persecución y criminalización de la solidaridad con Palestina. “Los criminales son los representantes del gobierno de Israel y quienes les apoyan con sus silencios cómplices, no quienes salen a la calle a defender la vida”, han concluido en esta jornada de lucha, la primera en Madrid tras el anuncio del alto al fuego, tras casi 50.000 personas asesinadas por Israel desde octubre de 2023.